ODONTOPEDIATRÍA
La odontopediatría es la rama de la odontología que se encarga del diagnóstico y tratamiento de las enfermedades dentales infantiles desde la temprana infancia hasta la entrada en la pubertad.
El objetivo de los tratamientos de odontopediatría es acompañar el crecimiento y desarrollo de una correcta dentición para detectar y evitar problemas bucodentales severos en la edad adulta.
Motivos más habituales para llevar a los niños al odontopediatra:
Los traumatismos son la causa principal de esta visita. Un golpe, una caída o un accidente son circunstancias que afectan, directamente, a las piezas dentales y que necesitan un tratamiento urgente.
Por otro lado, es posible encontrar casos de un aumento de las piezas dentales, de ausencia de los dientes definitivos, de tamaño irregular y de alteraciones en el esmalte dental provocado por el consumo de antibióticos.
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¿Qué tipos de tratamientos se realizan en la odontopediatría?
– Pulpotomía y pulpectomía: Son tratamientos muy similares a la endodoncia que se realiza en adultos. Se realiza para tratar las caries que han afectado a la pulpa o nervio de los dientes de leche.
– Empastes u obturaciones: En casos de caries, se utiliza un relleno cuando solo afecte al esmalte o a la dentina pero no a la pulpa, se puede colocar también una corona si la caries es muy extensa para proteger el diente.
– Aplicación de flúor: La odontopediatría tiene una gran parte preventiva, y el tratamiento preventivo más utilizado es el de la aplicación de flúor. El flúor se utiliza para ayudar a que los dientes crezcan fuertes y sanos, y a endurecer el esmalte.
– Ortodoncia interceptiva u ortopedia: Se utiliza para corregir y guiar el crecimiento de los huesos maxilares, ya que en edades tempranas es más sencillo hacerlo y se pueden evitar problemas graves en el futuro.
Ventajas de la odontopediatría:
– Mejora y corrección de hábitos.
– Mejora de la mordida.
– Corrección del crecimiento.
– Prevención de riesgos futuros.
– Evita el dolor.
– Sonrisa feliz y sana.
Se aconseja que la primera visita se lleve a cabo en torno al primer año de vida del bebé. Es importante mencionar que el consumo de papillas de frutas, el uso del biberón y la complicación de mantener la higiene dental de los pequeños a tan temprana edad pueden alterar su salud dental.
Aparece entre los 6 y los 12 meses, y normalmente se suelen caer con el mismo orden que han salido.
Debe ser de flúor, pero se debe controlar la cantidad. Hasta los 2 años solo una pequeña cantidad (manchar un poco el cepillo), hasta los 6 años aplicar una pequeña cantidad (como un guisante), a partir de esta edad el esmalte es ya maduro y se puede utilizar una de adulto, pero se recomienda seguir utilizando alguna pasta de flúor ya que este protege de la caries.